La Xunta de Galicia tiene previsto adquirir seis locales en el PAU de Navia para trasladar la oficina de empleo que actualmente está abierta en Coia. El Diario Oficial de Galicia (DOG) publicaba ayer la resolución del 26 de noviembre de la Secretaría Xeral y de Patrimonio de la Consellería de Facenda en la que se justifica la compra directa de los inmuebles para una mejor prestación del servicio.
La intención del Gobierno gallego es ganar espacio para ampliar la formación a nuevas especialidades, puesto que la actual sede comparte espacio con el centro de formación ocupacional. Se trata de la oficina que fue atacada la semana pasada con dos cócteles explosivos que ocasionaron importantes daños en su interior. Durante su inspección del inmueble, la delegada de la Xunta en Vigo, Lucía Molares, ya avanzó los planes de expansión de la Consellería de Traballo en la ciudad.
El anuncio de ayer supone el inicio de la tramitación de la adquisición directa de seis bajos en un edificio de la calle Teixugueiras. Esta nueva oficina sustituirá a la actual y fue necesario trasladarla de barrio "dadas las limitaciones del mercado inmobiliario en la zona", argumenta la resolución de Facenda, encargada de gestionar el patrimonio inmobiliario autonómico. En los próximos días se concretará la inversión necesaria y los plazos del proyecto.
La parroquia viguesa recibirá a 528 nuevas familias antes de finalizar el año sin que las prestaciones que recibe vayan parejas a esa evolución demográfica.
San Paio de Navia verá antes de final de año incrementada su población en 528 familias. De ellas, 384 corresponden a tantas viviendas de promoción pública que serán entregadas por la Xunta de Galicia, y 144 pertenecen a la cooperativa de UGT, que ya cuenta con todos los trámites del Concello y de la administración autonómica y que solo está pendiente de escriturar los pisos en los próximos días.
En total, se calcula que en esta nueva zona de la parroquia ya viven 15.000 vecinos, lo que en teoría debería ir parejo al incremento de dotaciones y servicios. Sin embargo, nada más lejos de la realidad. El gran parque iniciado en su día por la entonces Consellería de Vivenda Teresa Táboas acumula ahora dos años de retraso y muchos escombros a su alrededor.
Al permanecer algunas partes de la obra y calles cercadas, resulta imposible realizar la limpieza en ese entorno y entre los edificios.
La situación empieza a preocupar a los vecinos, sobre todo, por cuestiones de salud pública.
Pero la falta de limpieza por culpa de esa obra no es la única carencia de Navia. Más sorprendente es todavía que una urbanización nueva como es esa tenga ya problemas de aparcamiento. Aunque los inmuebles cuentan con plazas, da la impresión de que resultan insuficientes, a juzgar por los estacionamientos en doble fila que aparecen a diario a lo largo del principal vial, Teixugueiras. Las guarderías y, en general, las dotaciones educativas también se han quedado raquíticas y el Concello solicitará a la Xunta la ampliación del colegio Castelao o la construcción de un nuevo edificio, teniendo en cuenta las numerosas carencias y el deterioro que presentan las instalaciones actuales.
Los residentes reclaman un mayor control sobre el alumbrado público, ante los continuos fallos que dejan el barrio a oscuras.
En su opinión, el servicio de Correos no se ha adaptado a la nueva situación, lo que hace que los carteros no den abasto ante el incremento de población en la parroquia.
Reclaman que se pongan en marcha cuanto antes las instalaciones deportivas, máxime cuando hay numerosos niños y jóvenes.
En definitiva, Navia quiere un espacio en condiciones sin calles cortadas y sin suciedad, como tienen el resto de los mortales que residen en otros puntos de Vigo.
La urbanización, iniciada en los años noventa, ha supuesto la expansión más importante de la ciudad en la última década.
No tienen «constancia de que sea necesaria». Así de tajante se muestra la Xunta cuando se le pregunta por la ampliación del colegio público Alfonso Rodríguez Castelao de Navia, una obra que los padres de los alumnos del mismo llevan años reclamando. «En este momento, las necesidades del centro están cubiertas con las instalaciones con las que cuenta. O al menos no existe ningún informe de la inspección que indique lo contrario», aseguran desde la Consellería de Educación.
Los progenitores de los afectados, sin embargo, no están en absoluto de acuerdo. De hecho, han creado una comisión para coordinar las acciones que se plantean poner en marcha para acabar con una situación que tachan de «insostenible».
Uno de los principales problemas que denuncian es la falta de una pista cubierta que les permita a sus hijos disfrutar del recreo fuera del aula en las jornadas de invierno. «Los profesores no se atreven a sacarles al exterior los días de lluvia, algo lógico, pero tampoco se le puede privar de salir y correr al aire libre», señala un miembro de la comisión.
A esta deficiencia se suma el hecho de que el salón de actos -un aula algo más espaciosa que las restantes- no tiene capacidad para acoger a la totalidad de los escolares del centro, con lo que meter allí a los padres resulta implanteable. Este hecho ha desembocado en que, curiosamente, los familiares reciban un DVD con las actuaciones de los festivales del colegio ante la imposibilidad de disfrutarlos en directo.
Por si fuera poco, el gimnasio está preparado para albergar a doce niños, cuando varios grupos de infantil y primaria se encuentran completos, con 25 pequeños en cada clase. Los padres destacan que estos problemas son consecuencia del aumento de la población de Navia, algo que Educación también contempla. «Somos conscientes de que es una zona que está creciendo y si en algún momento el espacio actual no fuera suficiente sí se consideraría una ampliación», concluyen.
Los representantes del Anpa del Castelao se reunieron el martes con la concejala de Educación, Laura López Atrio, quien transmitió su apoyo a las reivindicaciones que le presentaron, si bien les advirtió que el problema no es de su competencia. «Nos mostró un documento del 2007 en el que la Xunta pedía los terrenos adyacentes al centro para la ampliación. Pero el proyecto que tendrían que haber presentado luego para poder comenzar las obras sigue en el aire». Los padres ya han solicitado una reunión con el conselleiro y con la jefatura territorial.